El «Dignité» en su última etapa del viaje a Gaza

 (ATENAS) La coalición internacional de la «Flotilla de la Libertad II: Sigamos siendo humanos» puede confirmar que, tras fondear durante la pasada noche en aguas internacionales, el barco de bandera francesa «Dignité / Karama» ha comenzado la última etapa de su viaje a Gaza. Deseamos toda la suerte a los que van a bordo y recordamos a Israel abstenerse de interferir nuestro barco mientras hace su viaje a través del ilegal e inmoral bloqueo marítimo que dicho país ha impuesto a la Franja de Gaza.

 

Es en buena parte debido a que el «Dignité» comenzó su viaje desde un puerto francés y que el gobierno galo rehusara interferir la iniciativa ciudadana de derechos humanos, el motivo por el cuál el barco continúa su misión. El «Dignité» y sus pasajeros y pasajeras -de Francia, Canadá, Grecia, Suecia y Túnez- representan a toda la flotilla, que fue retrasada por sabotajes y por un atroz acto de complicidad del gobierno griego con la violación de los derechos humanos que practica Israel y su política hacia Gaza, que el Comité Internacional de la Cruz Roja determina como «castigo colectivo». Pero ello también representa la firmeza y la determinación de la flotilla a navegar hasta que se rompa el bloqueo. La idea de que la Flotilla de la Libertad II pudiera ser detenida demuestra que no se entiende la naturaleza de su postura no violenta y su firmeza en su objetivo.

 

A pesar de que la mayor parte de los barcos han sido inhabilitados para abandonar los puertos griegos, la flotilla no obstante ha conseguido poner de relieve la criminal política del gobierno de Israel hacia Gaza. Los dirigentes israelíes han mostrado su decisión de usar la intimidación, mentiras, chantaje económico, amenazas de violencia y sabotaje para detener unos barcos que las autoridades militares israelíes han admitido que no llevaban armas. Esto claramente demuestra que el bloqueo israelí a Gaza no está fundamentado en la seguridad, sino que trata de castigar al pueblo palestino, denegando su libertad y aislándolos del resto del mundo.

 

Israel se cree intocable y continúa su ofensa a la humanidad en respuesta a la decisión de la comunidad internacional de tomar medidas concretas para defender los derechos del pueblo palestino. De hecho, tal y como hemos visto recientemente en Grecia, algunos actores significativos -incluyendo a la Unión Europea y los Estados Unidos- están siendo cómplices directos en los crímenes de Israel. Es por ello por lo que la sociedad civil internacional se ha movilizado para actuar de forma directa.

 

No podemos predecir cómo se comportará Israel mientras el «Dignité» se aproxima a Gaza, pero podemos afirmar que -mientras las amenazas y la violencia israelíes han fracasado intentando disuadir la solidaridad global con el pueblo de Palestina- los que están a bordo de este pequeño barco francés tienen la intención de alcanzar su destino. El «Dignité» porta un mensaje de solidaridad y empatía de la gente de todas partes del mundo con la gente de Gaza, y también con toda Palestina, que Israel nunca podrá silenciar.

 

Mientras el «Dignité» continúa navegando a Gaza, probando que los deseos de la sociedad civil mundial no pueden ser intimidados, los restantes barcos de la «Flotilla de la Libertad II: Sigamos siendo humanos» se están reagrupando para cumplir nuestras obligaciones hacia la sitiada población de Gaza y a los cientos de miles de personas de todo el mundo que han fundado y organizado este acto de solidaridad.

 

Mientras se mantenga el bloqueo ilegal a Gaza más barcos navegarán para hacerle frente; mientras Israel mantenga la ocupación, colonización y represión violenta de los palestinos y mientras nuestros gobiernos permanezcan en silencio sobre esto, el movimiento de solidaridad internacional se movilizará para desafiarlo directamente.

 

La historia demuestra que a Israel se le están agotando las opciones; nosotros nos estamos volviendo más fuertes.